Nuevo informe de la vida de los pueblos bárbaros que viven en la América septentrional. Saben usar automóviles y con eso aparentan cierto grado de avance tecnológico, pero sus costumbre aldeana de tirar los deshechos en cualquier lado no ha cambiado.
Estas llantas llevan meses en la calle. Al principio sólo era una que nadie recogió. Con el tiempo se han sumado otras. Cuando por fin venga un empleado público a llevarselas, alguien habrá encontrado una buena manera de deshacerse de las llantas viejas: tirarlas en la calle hasta que alguien las recoja.
Dos excelentes libros para entender nuestras miserias nacionales:
ResponderEliminarCarlos Elizondo Mayer-Serra "Por eso estamos como estamos" y el de Jorge Castañeda "Mañana o pasado. El misterio de los mexicanos".
El primero se enfoca en lo que hemos hecho mal como País; el segundo en lo que somos.
Muy recomendables.
Luis Zarzosa
El 26 de junio, una semana después de poner esta entrada, volví a pasar por el lugar y las llantas ya no están. Me gustaría saber quién las recogió.
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